Historia

El hombre entraba y salia del bar, 8:45 de la mañana, esperando que los otros viajeros del omnibus en que iba a viajar de vuelta a Inglaterra, estuvieran listos para salir.
Primero nos pidio agua. Después se fue y al rato volvio.
-Puedo tomar un poco de ese jugo de naranja que tienen ustedes?
-Claro!
Le dimos una copa.
Cinco minutos después vuelve:
-¿Me puede servir una cerveza?
-Como no, no hay problema.
-Una grande, tengo mucha sed. Es un poco temprano para tomar una cerveza, no?
-Nooo, pero por favor, le dijimos my compañera y yo, nunca es muy temprano para tomar una cerveza (aunque en realidad las dos pensamos que en verdad ERA un poco temprano para mandarse medio litro de birra).
Mientras secaba unas tazas y platos, del otro lado de la barra, le pregunté:
-¿Disfruto su estadia?
-Si, mucho; vengo casi todos los años.
-¿Tiene familiares que estuvieron en la guerra?
-Mi papa; él estuvo en las dos guerras.
-¿En las dos guerras?
-Si, él nacio en 1899 y murio en 1979, y le toco estar en las dos guerras.
-¿Y él vino a visitar alguna vez los campos de batalla?
-No, nunca pude lograr que viniera. Demasiados malos recuerdos, amigos muertos…
Seguia tomando, con la vista en la barra del bar. Le comenté:
-Hace poco vi un documental que hizo la BBC sobre Auschwitz. Fue increible, algunos detalles que no conocia…
-Si, un lugar terrible, eh…? Los alemanes tienen mucho que responder, todavia… Bueno, gracias por la cerveza.
-Que tenga un buen dia…