Fue todo tan veloz que todavia no lo puedo creer.
El dia anterior a viajar a la Argentina (miercoles 18) habia tenido un control, una ecografia y el dr habia visto algo de lo que no estaba seguro, y nos recomendo hacer un contrachequeo para verificarlo, aunque en verdad no parecia alarmado, por lo que decidimos continuar con el viaje normalmente.
El mismo jueves en que llegue a Baires a pesar que estaba muy cansada fuimos con mi hermana a su obstetra (ella esta embarazada) y le mostramos la ecografia previa, y ya estaba alarmado, nos dijo que me revisaria su colega que ademas es especialista y tiene un equipo muy avanzado.
En sintesis, la bebe que esperabamos tenia hidrocefalia, algo que a esta altura -temprana- del embarazo, donde el cerebrito no esta totalmente formado, produce un daño irreversible, no hay desarrollo del sistema nervioso y si se deja pasar tiempo puede poner en peligro mi salud tambien. O sea un shock…
De modo que con ayuda de Yurguen adelantamos mi fecha de regreso para el jueves 26 porque yo queria tratarme en Belgica con él al lado, asi que tuve que volverme y ya llegue el viernes pasado.
Esta enfermedad no tiene cura y si se continua con el embarazo, la mama puede empezar a tener los mismos sintomas que la bebe, reteniendo mucho liquido y agregando dificultades y eventualmente poniendo en riesgo su salud. Ninguno de los doctores nos dio una minima esperanza.
El martes a la noche me internaron para iniciar el trabajo de parto, fueron 20 horas de mucho sufrimiento pero finalmente pude dar a luz naturalmente que era lo que queriamos (y no tener que hacer una cesarea). La pudimos ver, a la bebita y con todo el dolor del alma decirle adios. Iba a ser una nena hermosa, tenia las manitos como si fueran las de Yurguen en miniatura y los piecitos igual que los mios, incluida la uña…
Ahora acabamos de volver del hospital hace unas horas y estoy tratando de descansar y empezar a sanar.
Emma, que a pesar de ser tan chiquitita fue la que lo ayudo tanto a mi papa a reponerse, y nos dio a todos una energia increible, ahora es una astronauta. Buen viaje, mi querida.
No puedo seguir escribiendo porque las lagrimas no me dejan.