Este año los belgas estan contentos porque reciclaron un tres por ciento mas de basura que el año pasado: se reciclo el 89,9 por ciento del total de desperdicios.
Aqui se saca la basura una vez por semana, los dias miércoles, y hay que separarla en bolsas diferentes: la verde es para residuos organicos, la celeste es para metal y plasticos, y el papel y carton va aparte, solito.
Los negocios tienen una categoria especial y usan las bolsas naranjas que se ven alli. Las bolsas celestes son transparentes, y si los recolectores ven que pusiste algo ahi que no corresponde, no se la llevan y te ponen un sticker con una manito que significa “bolo, eso no va aca, sacalo que si no no me la llevo”.
El vidrio y el aceite, y los aparatos y la basura del jardin, hay que llevarlos a un lugar que se llama “container park”, donde hay containers diferentes para cada cosa.
Para saber cuando hay que sacar el plastico y el carton, reparten en cada casa un calendario, y hasta hay una revista sobre basura, tecnicas para hacer compost, reciclar…
Es sorprendente, pero asi separada, la basura de dos personas, es: una bolsa verde por semana y una celeste cada quince dias + el carton y papel -que van aparte.
Las bolsas verdes son muy caras; casi un euro cada una, pero es porque ese dinero es el que subsidia la recoleccion y el reciclado posterior. Yo no he visto grandes basurales hasta ahora.
Cada vez que sacamos la basura pienso, “por qué no haremos esto en la Argentina? Un sistema asi le daria trabajo digno a un monton de gente, no cuesta tanto, es ponerse las pilas y organizarlo…”
En fin.